Siguen llegando nuevos ‘fichajes’ a la disciplina del Barça que no hacen más que alegrar el semblante de Frank Rijkaard. Hoy le toca el turno al argentino Leo Messi. El delantero regresa a Barcelona tras haber estado un mes y medio en Argentina, trabajando codo a codo y de manera incansable junto a Juanjo Brau, recuperador del primer equipo del Barça, con el único fin de dejar atrás la rotura del quinto metatarsiano que se produjo en el partido de Liga frente al Zaragoza el pasado 12 de noviembre de 2006. Un percance que frenó en seco su progresión y que hizo que el Barça perdiera a uno de sus hombres más determinantes.
Desde ese día y hasta el de hoy Leo Messi ha tenido que atravesar una nueva fase de recuperación, la primera fue la temporada pasada, para poder regresar lo antes posible a la disciplina de grupo como ahora se está confirmando. El futbolista hará su aparición en el aeropuerto del Prat a primera hora de la tarde y tras ofrecer una rueda de prensa en el Camp Nou se someterá a un test de campo para que los galenos del club vean cómo se encuentra realmente y cómo se ha trabajado en Argentina.
Leo ya ha avisado que se encuentra bien aunque un poco falto de ritmo, pero que su intención es poder entrar en el campo para disputar algunos minutos del partido contra el Racing de Santander, duelo que se jugará el domingo 11 de febrero a las 19 horas en el Camp Nou. Lo que tiene claro el rápido futbolista es que quiere llegar a tope al duelo de la Champions League frente al Liverpool que está programado para el miércoles 21 de febrero
También habrá una cumbre médica en el Camp Nou en la que estarán presentes el jefe de los servicios médicos del club, Ramon Canal, Antoni Dalmau, el cirujano traumatólogo que operó a Messi dos días después de que se produjera su lesión y el doctor Ricard Pruna, responsable médico del primer equipo que ha estado en contacto en todo momento con Brau mientras se estaba trabajando en Argentina. El jugador se fue a su país para poder aislarse del día a día y evitar capítulos como los del año pasado en los que veía a sus compañeros entrenar.
La pasada madrugada, en España, Leo Messi abandonó con una cierta tristeza Arroyo Seco, donde ha estado trabajando durante todos estos días, y se dirigió hacia el aeropuerto, donde fue reconocido por algunos aficionados que le desearon mucha suerte en el Barcelona. Atrás quedaban días de sacrificio y mucho trabajo para volver a los terrenos de juego.
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