Gracias, Messi!

Leo volvió a maravillar en el Camp Nou con su descaro ante la dura defensa del Chelsea y nadie olvida su gol en Bremen, cada día más valioso

Leo Messi volvió a ser el mejor jugador del Barça ante el Chelsea, igual que sucedió en Stamford Bridge o en el Bernabéu. No tuvo el premio del gol y sus asistencias tras endiablados regates y vertiginosas internadas no pudieron ser aprovechadas (Ronaldinho envió por encima del larguero un remate muy claro en la primera parte). Pero gracias al argentino el Barça sigue dependiendo de sí mismo en la Champions League.

27 de septiembre. Weserstadion. Werder Bremen-Barça. Minuto 89. Deco encuentra a Messi con un asistencia genial y Leo marca el 1-1 con la zurda. Un punto, sí, pero cada día que pasa más valioso. No sólo porque el equipo azulgrana lo sumó, sino porque también restó dos al equipo alemán, que ahora ya tendría nueve. Después de aquel encuentro, el Werder Bremen ha sumado los seis puntos ante el Levski Sofía y el Barça, sólo uno ante el Chelsea.

Aquel gol de Messi cuando todo el mundo veía al Barça atascado y casi sin opciones de empatar posibilita que los de Rijkaard se aseguren la clasificación venciendo en los dos partidos que le quedan. No importa que el equipo alemán supere al Chelsea en la próxima jornada. El Barça-Werder Bremen del 5 de diciembre será épico.

Como Bakero en K'lautern

Quién sabe si con el tiempo ese gol de Messi se recordará como el de Bakero en Kaiserslautern hace quince años. Para ello el Barça debería conquistar su segunda Champions consecutiva. José Mari Bakero marcó su histórico gol el 6 de noviembre de 1991. El sistema de aquella Copa de Europa consistía en dos eliminatorias previas a la liguilla de dos grupos de cuatro clubs. El primero de cada grupo jugaba la final. Tras eliminar al Hansa Rostock en primera ronda, dos goles de Txiki Begiristain en el Camp Nou parecían sentenciar al Kaiserslautern (2-0), pero el equipo alemán se colocó 3-0 en la vuelta. El Barça parecía eliminado cuando en el último minuto surgió la milagrosa cabeza de Bakero para marcar el 3-1. Luego llegó la liguilla, la final ante la Sampdoria y el gol de Koeman.
(Mundo Deportuvo)