Leo siembra el terror en la concentración con la ‘Play’

Leo Messi gana y gana. En el campo de juego, pero también en la PlayStation. El jugador blaugrana se ha convertido en el rey del ‘Winning Eleven’ y con el equipo virtual del Barcelona, como no podía ser de otra manera, día a día les da un repaso a todos sus compañeros de plantilla.

Fiel a sus colores aunque sea a miles de kilómetros y defendiendo la camiseta de la albiceleste, Messi no juega ni con el Real Madrid, ni con el Inter de Milán, ni con el Milan. El canterano azulgrana elige al Barcelona para los duelos con sus compañeros de concentración y, como tampoco podría ser de otra manera (es algo que haría cualquier futbolista, más aún un crack como él), siempre se ubica en el once inicial.

Cuentan que es imbatible y que sus compañeros no paran de sufrirlo. Con el delantero de Boca Juniors, Rodrigo Palacio, es con quien más juega, pero en la intimidad del búnquer argentino aseguran que el único que pudo plantarle cara a Lionel Messi a los mandos de la videoconsola fue el mediocampista Lucho González, quien dice estar 1-1 en el historial de duelos virtuales.

Pero las virtudes de Leo con el mando a distancia van más allá de los derbies internos, al punto que también goleó 5 a 0 a un relator de TV de Argentina y le dio un ‘baile’ bárbaro nada menos que al hijo del ‘Coco’ Basile, otro que cayó derrotado por la magia del rosarino a los mandos del Barça de PS. La estrategia de Messi es inalterable sea quien sea su opositor: Ronaldinho por la izquierda del campo de juego y él mismo por la derecha. “¡Grita los goles con todo, como si estuviera jugando un partido de verdad!”, delatan testigos presenciales de duelos que parecen alcanzar, por momentos, una tensión casi a la altura de los de la auténtica competición.

Con el joystick en sus manos, dicen que Messi aprieta el botón R2 con tanta agilidad que es imposible quitarle el balón cuando regatea. Si su pie es como un guante, sus manos están a la altura de las circunstancias. Un reflejo de lo que hace en el campo de juego, cuando hace maniobras típicas de la realidad virtual de la PlayStation. En definitiva, es tan bueno que cuesta diferenciar la ficción de la realidad...